5 destinos para disfrutar del modernismo en España

Son muchos los lugares en España que todavía conservan sus edificios y monumentos de estilo modernista, pero algunos de ellos aglutinan mayor cantidad de sitios para visitar y ver, e incluso tienen señalizadas o preparadas rutas modernistas para recorrer la villa o ciudad y no correr el riesgo de perderse ninguna parada imprescindible.

Así que hoy vamos a proponerte que te animes a conocer algunas de esas localidades que, por lo demás, se encuentran incluidas en la Ruta Europea del Modernismo. Toma nota para visitar tan pronto como te sea posible estos cinco destinos para disfrutar del modernismo en España. No te arrepentirás.

Tarragona (Cataluña)

Todos sabemos que una ciudad como Tarragona (Cataluña), con más de 2500 años de antigüedad, atesora un patrimonio excepcional. Y, aunque lo primero que solemos recordar son sus monumentos y restos romanos, lo cierto es que también alberga muchos ejemplos de arquitectura modernista. De hecho, en ella puedes recorrer la Ruta Modernista, un itinerario urbano con una quincena de paradas para descubrir los edificios más representativos del modernismo y el eclecticismo del siglo XIX.

Destacan entre ellos edificios civiles como el Teatro Metropol, el matadero, el viejo Hotel Continental, la Casa Ripoll, la Casa Ximenis, la Casa Salas, la Casa Vallvé y la Casa del doctor Aleu. Pero también cuenta con monumentos religiosos como la capilla de la iglesia de Sant Francesc, el santuario de Nuestra Señora del Sagrado Corazón, el mausoleo de Jaime I y el ostensorio de la catedral.

Barcelona (Cataluña)

Una de las capitales europeas del Modernismo es, sin duda, Barcelona (Cataluña). Resulta bastante lógico si tenemos en cuenta que esta ciudad aglutina gran parte de la obra de Gaudí y otros arquitectos destacados como Lluís Domènech i Montaner, Josep Puig i Cadafalch o Joan Rubió i Bellver, entre otros.

Y es que si vas a Barcelona no puedes dejar de recorrer su ruta modernista. En el Eixample verás las fachadas modernistas de las viviendas de la antigua burguesía barcelonesa, entre las muchas casas que contemplarás en la ciudad. Ejemplo de ello son la Casa Morera, la Casa Amatller y la Casa Batlló, en el Paseo de Gracia (Passeig de Gràcia). Pero también resultan imprescindibles el Palau de la Música, el Museu de Ciències Naturals i Zoologia y el Parc de la Ciutadella.

Son decenas los edificios modernistas que puedes admirar por toda la ciudad. No hay que olvidar que nueve de ellos están declarados Patrimonio de la Humanidad, y siete de esos nueve llevan la firma del arquitecto Gaudí. Puedes comprar la guía de la Ruta del Modernismo en Barcelona, pero en la ciudad también puedes seguir las baldosas rojas en el pavimento que señalizan el itinerario y recorrerlo por libre. Y no olvides que muy cerca de la ciudad se localiza la colonia Güell, que bien merece la visita como destino modernista propio, una joya no siempre conocida por el gran público.

Comillas (Cantabria)

Una de las localidades más bellas de Cantabria también resulta un destino perfecto para admirar sus monumentos modernistas. Nos referimos a Comillas, donde el modernismo y el eclecticismo comenzaron a tener una presencia significativa a partir de 1881, después de que Antonio López López fuera nombrado Marqués de Comillas y esta villa se convirtiera en lugar de veraneo de la nobleza de la época.

Seguramente el edificio modernista más famoso en Comillas es el conocido como El Capricho de Gaudí, catalogado como Monumento Histórico-Artístico en el año 1969. Pero hay otros edificios impresionantes como la capilla y el palacio de Sobrellano, obra de Joan Martorell; el cementerio diseñado por Lluís Domènech i Montaner y Cristóbal Cascante, así como el Seminario Pontificio y el Hospital de Comillas. El ayuntamiento ha desarrollado una ruta modernista con 11 paradas para que puedas descubrirlas todas sin problema.

Ferrol (Galicia)

En el centro de Ferrol, en la provincia gallega de A Coruña, el barrio de A Magdalena, catalogado como Conjunto Histórico-Artístico, se caractiza por aglutinar el proyecto urbano del siglo XVIII, con un plano de calles en retícula conocidas popularmente como «la tableta de chocolate», con grandes ejemplos de arquitectura modernista de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Estos son obra todos ellos del arquitecto municipal Rodolfo Ucha Piñeiro. Te sorprenderán los edificios con sus galerías, los adornos florales con cariátides de las fachadas, los balcones en voladizo y las estructuras de madera blanca.

La Ruta del Modernismo de Ferrol te conduce por esta ciudad en Galicia para descubrir la veintena de edificios modernistas que encontrarás a tu paso. Muchos de ellos son viviendas, como la Casa Pereira I y II, la Casa Romero o la Casa Antón, entre otras, pero también hay otros edificios de uso público como la Pescadería, actual nave del mercado municipal, el Teatro Jofre, la Fonda Suiza o el antiguo Dispensario Antituberculoso. Si no quieres hacer este recorrido de forma libre, desde la web de Turismo Ferrol se ofrece la posibilidad de reservar visitas guiadas.

Teruel (Aragón)

A causa de la arquitectura mudéjar de entre los siglos XIII y XIV que Teruel fue catalogada como Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco, allá por el año 1986. Pero eso no son los únicos tesoros de esta hermosa localidad. Y es que Teruel también está incluida en la Ruta Europea del Modernismo.

Los edificios burgueses de finales del XIX y principios del XX, en los que destacan los portales, los zaguanes y las escaleras, comenzaron a destacar en la ciudad. La Ruta Modernista que puedes seguir por Teruel cuenta con 17 paradas, que indican en su mayor parte diseños arquitectónicos obra de Pau Monguió Segura. Verás numerosas viviendas como la Casa Ferrán, la Casa Bayo, la Casa El Torico y la Casa de Natalio Ferrán, pero también edificios de uso público como las Escuelas del Arrabal y el antiguo asilo, y un par de ejemplos religiosos, como son la ermita del Carmen y la iglesia de Villaespesa.