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La Navidad es una época en la que reunirse con los amigos y la familia y disfrutar de tradiciones como las comidas de este tiempo invernal alrededor de una mesa engalanada para la ocasión. En esas reuniones no pueden faltar las bandejas de postres y dulces para la sobremesa, mientras se prepara el café, las infusiones y el chocolate o se abre la botella de cava.

Repasamos hoy algunos de los dulces más típicos de la Navidad española, esos que suelen degustarse en todas las casas en esta época del año. ¿Te falta añadir alguno de ellos a tu mesa?

Turrón

turrón
Fuente: Pixabay/pixel2013

El dulce más típico de la Navidad en España es el turrón. Y es que esta elaboración dulce que se prepara con miel, almendras, azúcar y clara de huevo ha dado ya la vuelta al mundo, de manera que en la actualidad es posible encontrar todo tipo de variedades que parten de la preparación principal. Puedes elegir entre turrones de coco, de naranja y chocolate, de chocolate blanco y de pistacho entre un sinfín de variedades. Siempre hallarás alguna que agrade a tu paladar.

El turrón tiene su origen allá por el siglo XVI y su procedencia es árabe. En España contamos con la Indicación Geográfica Protegida Jijona y Turrón de Alicante, así como la Indicació Geogràfica Protegida Torró d’Agramunt, que comprueban y vigilan la calidad del producto. Así que si eliges los que lucen esta distinción, acertarás seguro.

Polvorones

Polvorones

Los polvorones le disputan a los turrones el trono de los dulces más clásicos de la Navidad en nuestro país. Se trata de un dulce tradicional andaluz, cuya elaboración incluye harina de trigo, almendras, azúcar y grasa de cerdo. Y así como el sitio más importante de producción de turrones es Jijona (Alicante), cuando hablamos de polvorones hay que que hablar de Estepa (Sevilla).

De nuevo, para estar seguro de que adquieres polvorones de calidad, puedes seleccionar aquellos con la Indicación Geográfica Protegida Mantecados y Polvorones de Estepa.

Mantecados

mantecado
Fuente: Flickr/Javier Lastras CC BY 2.0

Los mantecados son otra de esas delicias dulces que podemos comer en nuestro país durante todo el año, aunque su consumo es más típico y habitual en Navidad. También es un dulce que se originó en Andalucía, allá por el siglo XVI, aunque hoy en día los que más fama tienen son los de otros lugares de España, como los de Toledo y Valladolid.

Al igual que los polvorones, los encontrarás en gran variedad de sabores, como canela, coco, limón o chocolate. También los encontrarás bajo la Indicación Geográfica Protegida Mantecados y Polvorones de Estepa.

Hojaldrinas

El Pantera
Fuente: Wikimedia/El Pantera CC BY-SA 4.0

Las hojaldrinas son parecidas a mantecados y polvorones, pero tienen como diferencia principal que en su interior llevan varias capas de hojaldre, por lo que su textura es completamente distinta. Los ingredientes más tradicionales en su elaboración son la harina de trigo, la grasa de cerdo, el azúcar, el zumo de naranja y el vino.

Mazapán

Mazapanes

Originarios de la bella ciudad de Toledo (Castilla-La Mancha), no podemos olvidar los mazapanes entre los dulces navideños españoles que estos días ponemos en nuestras mesas. También constan sus primeras referencias en el siglo XVI y no se tiene muy claro si su procedencia es árabe o si fueron un invento de las monjas del Convento de San Clemente de Toledo.

Sea como fuere, la receta incluye almendras y azúcar machacado con la ayuda de un mazo, de ahí que pasara a denominarse pan de maza y, con el tiempo, mazapán. Aunque se elaboran en otros puntos del país, ten en cuenta que también está disponible la Indicación Geográfica Protegida Mazapán de Toledo.

Alfajor

alfajor Navidad
Fuente: Wikimedia/El Pantera CC BY-SA 4.0

De nuevo vamos a tierra andaluza para descubrir otro de los dulces navideños españoles: los alfajores. Se preparan con nueces, miel y una pasta de almendras. También son típicos de Murcia, donde les añaden otros ingredientes como canela, clavo y anís.

Los más populares son los que cuentan con la Indicación Geográfica Protegida de Alfajores de Medina Sidonia, elaborados en este municipio de la provincia de Cádiz.

Peladillas

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Fuente: Wikimedia/Tamorlan CC BY 3.0

De la Comunidad Valenciana provienen las peladillas, otro de los dulces típicos que seguro que pones en tu mesa este año. Son almendras confitadas que también suelen regalarse en los bautizos a los invitados. Como ha pasado con otros dulces de este tipo, en la actualidad, las encontrarás en gran variedad de sabores.

Mantecadas de Astorga

mantecadas
Fuente: Wikimedia/Rodelar CC BY-SA 4.0

Aunque las mantecadas de Astorga son uno de esos dulces que se degustan todo el año, es típico que formen parte de las delicias que se ponen en la mesa en Navidad. No deben confundirse con los mantecados, puesto que su elaboración y sabor es por completo diferente.

Las mantecadas de Astorga son un dulce de convento que tienen su origen en el siglo XIX, en el monasterio de Sacti Spiritus. Su popularidad fue creciendo año tras año y comenzaron a prepararse fuera de sus muros. En la actualidad, cuentan con el sello del Consejo Regulador e Indicación Geográfica Protegida.

Rosco de vino

roscos de vino
Fuente: Wikimedia/Tamorlan CC BY 3.0

Los roscos de vino, con su tradicional forma de rosquilla, se preparan con vino dulce y frutos secos, aunque también los encontrarás elaborados con ajonjolí y aguardiante. Los más famosos son los de Castilla-La Mancha y los de Málaga.

Roscón de Reyes

roscón de Reyes
Fuente: Flickr/ Mumumío CC BY 2.0

Y terminamos con un clásico entre los clásicos: el roscón de Reyes, probablemente, el más popular de nuestros postres durante la Navidad. El roscón se desayuna, se pone de postre o se merienda en la mayoría de las casas españolas el día de Reyes y aunque la receta original es una especie de bolla dulce sin rellenos, en los últimos tiempos se han puesto de moda aquellos rellenos con nata montada o con trufa.

Lo típico es que en su interior se inserte en la masa un haba y la figura de un rey. Quien encuentre el haba, tendrá que pagar el roscón y quien encuentre al rey deberá ser coronado con la corona que suele entregarse con él. Y con esta costumbre tan emblemática, los españoles ponemos punto y final a las fiestas navideñas cada 6 de enero.