Entre los vinos de nuestro país, los últimos años han alcanzado gran auge los vinos ecológicos, aunque no sean distinguidos siempre por todo el público de entre el resto de los caldos españoles. Lo cierto es que cuentan con unas características particulares y bodegas singulares a lo largo y ancho del territorio, por lo que los aficionados al enoturismo encontrarán gracias ellos destinos de interés y la posibilidad de vivir nuevas experiencias enológicas.
En esta ocasión te contamos todo lo que debes saber sobre los vinos ecológicos para que comprendas en qué se diferencian del resto y cuáles son algunas de las bodegas ecológicas más destacadas de la península ibérica que puedes visitar, en las que apuntarte a actividades y catar sus mejores caldos.
Qué es el vino ecológico
Para que un vino pueda ser considerado ecológico debe seguir la normativa específica de la Unión Europea, en la que se hace referencia a todos los requisitos ha cumplir durante el proceso de producción del vino. Esto incluye desde las tierras de cultivo hasta la bodega, por lo que se especifican los criterios a seguin en lo referente a los viñedos, a la elaboración y al embotellado y almacenaje del vino, siempre con la finalidad de que se consiga un producto lo más natural posible.
Aquellos vinos que cumplan con esos requisitos obtienen un certificado y un etiquetado particular que los identifica, otorgado por la entidad competente. Esa etiqueta ha de certificar además el compromiso medioambiental y la ejecución de prácticas de sostenibilidad. Puedes reconocer el vino ecológico antes de comprarlo gracias al logotipo de la etiqueta: un sol y una luna con fondo azul y tres líneas en diagonal, junto con la hoja verde ribeteada de estrellas que acredita la certificación ecológica.
Características del vino ecológico
De forma general hay que tener en cuenta que estos vinos deben proceder de la agricultura ecológica. Como consecuencia, el viñedo ha de ser ecológico, por lo que no se pueden usar determinados tratamientos químicos, y se convierte en necesaria la utilización de abonos orgánicos naturales al tiempo que se prohíben prácticas tales como la quema de rastrojos. Las uvas de los viñedos ecológicos deben encontrarse separadas de las del viñedo tradicional y transportarse en recipientes aptos para uso alimentario. Asimismo, el proceso de siembra y recogida se ejecuta de forma manual.
No obstante, está permitida la utilización de levaduras y bacterias, pero no pueden modificarse genéticamente, y también es posible usar el ácido tartárico natural cristalizado que se obtiene de las uvas. De igual modo, se controla la adición de sulfitos, pues el máximo permitido es de 100 miligramos por litro para el vino tinto, cuando en el vino tradicional es superior (150 miligramos).
Entre el resto de características del vino ecológico, cabe destacar que siempre ha de almacenarse en zonas separadas del resto de vinos tradicionales y que su embotellado debe realizarse en cristal y con corchos naturales, lo cual también asegura la supervivencia y protección de los alcornocales de nuestro país.
Bodegas Protos (Valladolid)
Cada vez más bodegas lanzan este tipo de vinos en España y, de hecho, nuestro país es el principal productor de vinos ecológicos certificados bajo la normativa europea. Ejemplo de ello es Bodegas Protos (Camino Bodegas Protos, 24-28, 47300 Peñafiel, Valladolid), cuyos viñedos de Ribera del Duero contarán con el certificado de vino ecológico desde la añada del 2021, y que ya cuenta con dos vinos ecológicos en el mercado: Protos Tempranillo Ecológico 2018 y Protos Verdejo Ecológico 2019.
En las vallisoletanas Bodegas Protos también se ofrecen actividades enoturísticas, con la visita al denominado Jardín de variedades y a los viñedos, así como a la vanguardista bodega diseñada por el arquitecto Sir Richard Rogers y Alonso Balaguer Arquitectos Asociados, donde también es posible disfrutar de una cata. Es necesaria reserva previa para la visita.
Bodegas Aranleón (Valencia)
Entre las bodegas de la D.O. Utiel-Requena con vinos ecológicos, se encuentran las Bodegas Aranleón (Carretera Caudete, 3, 46310 Los Marcos, Valencia), a un centenar de kilómetros de la ciudad de Valencia.
Aquí también se ofrece experiencias de enoturismo, las cuales tienen en cuenta a toda la familia, ya que organizan actividades para niños y tienen ludoteca. En lo que respecta a los adultos pueden disfrutar de catas de uvas, catas de vino ecológico, degustaciones de comida típica de la región y recorridos por la bodega, entre otras. Entre sus mejores caldos destaca el vino tinto ecológico Aranleón SÓLO, perfecto para acompañar carnes rojas, embutidos y quesos semicurados.
Bodegas Corisca (Tui)
En Galicia también encontrarás estupendos vinos ecológicos en sus bodegas. Una de ellas es Bodegas Corisca (Baldráns, 36700 Tui, Pontevedra), dentro de la D.O. Rías Baixas, con un estupendo albariño ecológico.
Con unos terrenos certificados como agricultura ecológica, los viñedos y las instalaciones de la Bodega Corisca pueden visitarse en un entorno único, muy cerca del río Miño, en plena naturaleza. Durante el recorrido también se ofrece una cata de vinos acompañada de pinchos ecológicos de patés y queso. Es necesaria cita previa.
Viña Ijalba (La Rioja)
Bodegas Viña Ijalba (Carretera Pamplona, km 1, 26006 Logroño, La Rioja) constituye la primera bodega ecológica de La Rioja. Las experiencias enoturísticas aquí son variadas. Es posible realizar una visita guiada por los viñedos y la bodega con cata y aperitivo; asistir a la vendimia y realizar varias catas desde la fermentación hasta el embotellado, y la degustación de un crianza; o apuntarte a las catas singulares.
Bodega Clos Galena (Tarragona)
La Bodega Clos Galena (Camino de la Solana, s/n 43736 El Molar Tarragona, España, El Molar, Tarragona) elabora sus vinos ecológicos mediante un sistema de vinificación tradicional, y ofrece actividades de enoturismo. De tal modo, es posible efectuar una visita por las viñas ecológicas y la bodega con una cata y comida opcional; apuntarse a una visita y desayuno con tenedor con productos de proximidad; o una visita y cata que culmina con una comida de cocina catalana en la propia bodega o una calçotada. Un plan perfecto si buscas disfrutar del buen vino y de la gastronomía en Cataluña.
Únete a la conversación