Le Méridien Barcelona es mucho más que un hotel de lujo; es un reflejo vivo de la rica historia y cultura de esta cautivadora ciudad. El rico patrimonio artístico de Barcelona inspira tu experiencia mientras disfrutas de la cultura local, con todas las atracciones principales a poca distancia a pie. Es el sitio perfecto para acomodarte si quieres descubrir todos estos sitios de interés, los sonidos y los aromas que te van a rodear allí.
Un hotel con mucha historia
Lo que más me llamó la atención fue la historia del edificio. Le Méridien Barcelona se encuentra en el terreno donde se levantaban los Almacenes El Siglo antes del devastador incendio de 1932. Después llegaría el Grand Hotel Manila, que se inauguró en 1957 y se convirtió en un centro artístico y cultural visitado tanto por residentes locales como por personajes famosos de todo el mundo debido a su proximidad al teatro del Liceu. El edificio fue construido por la Compañía General de Tabacos de Filipinas, que tenía su sede central al otro lado de la calle.
Esa vinculación con el arte sigue hoy en día vigente con el programa Unlock Art. Le Méridien va más allá de abrir puertas: ofrece acceso gratuito a célebres galerías e instituciones para los viajeros que disfrutan de los paseos culturales gratis. A través de este programa, el hotel se ha asociado con centros culturales de todo el mundo para ofrecer a los huéspedes experiencias locales inspiradoras con solo presentar su llave de habitación Unlock Art.
Lujo y comodidad en habitaciones que miran a la Ramblas
Desde la majestuosa vista de la famosa Ramblas hasta el aroma a café recién tostado que da la bienvenida en el lobby, cada detalle está cuidadosamente diseñado. Con 231 habitaciones y suites, este hotel ofrece una experiencia excepcional que combina comodidad, elegancia y una ubicación privilegiada. Las suites se adaptan a las preferencias y necesidades de cada viajero gracias a sus amenidades especiales y amplias instalaciones. Desde suites familiares que pueden acomodar a 4 personas hasta las suites Grand Terrace con un gran espacio al aire libre y suites en esquina que ofrecen vistas a la calle más emblemática de la ciudad.
Yo tuve la suerte de estar alojada en una habitación con una preciosa terraza, casi tan grande como la propia suite y, aunque fue un día nublado, la disfruté igualmente. Tenía unas hamacas, una mesa de comedor y muchas plantas. En general, la gran ventaja de mi suite fue el diseño del espacio: la zona de dormitorio y la de descanso fueron, obviamente, mis favoritas. El sofá era muy cómodo y una mesa de centro de madera que me encantaría tener en mi casa. Me sentí rodeada de un ambiente muy moderno y acogedor.
Su oferta gastronómica
Le Méridien Barcelona ofrece varias experiencias gastronómicas. El restaurante CentOnze, que ofrece un ambiente cosmopolita pero relajado, te invita a disfrutar de una exploración por los sabores locales, como las tapas auténticas de Barcelona o la paella, en un luminoso ambiente al nivel de la calle con vistas a Las Ramblas.
Por la noche, toma protagonismo un bar de cócteles en donde triunfa la música de los años 50 a principios de los 70, con influencias de la música New Wave y los grafitis de la cultura pop. Especialmente interesante es la hora del cóctel, un evento social en el que mixólogos expertos sirven sus chispeantes creaciones como parte de Le Méridien Sparkling. Ubicado dentro del hall, el informal Longitude Bar 02º 10' es el lugar ideal para un desayuno más informal, disfrutar de un café o simplemente pasar a recoger un pastel antes de salir a explorar la ciudad.
Pero la experiencia en Le Méridien Barcelona va más allá de la gastronomía. El Explore Spa Studio es un oasis de relajación donde los huéspedes pueden revitalizar mente y cuerpo con terapias y tratamientos rejuvenecedores. Y, para aquellos que desean mantenerse activos, el gimnasio ofrece una variedad de opciones para satisfacer todas las necesidades de acondicionamiento físico.
Únete a la conversación