Puede parecer mentira, pero un núcleo tan pequeño como Navaluenga, con el ambiente serrano característico de la Sierra de Gredos, tiene un poco de todo para captar la atención de los visitantes. Y es que esta población perteneciente a la provincia castellanoleonesa de Ávila, sorprende a los turistas por su enorme oferta de atractivos.
Quién viaja en busca de curiosidades históricas, aquí las va a encontrar. Aquellos que disfrutan de la naturaleza plenamente y sin agobios, en Navaluenga tienen un destino fabuloso. Los amantes de buen comer o del enoturismo, tiene una cita de lo más exquisita en este rincón de Ávila. E incluso van a alucinar con las piscinas naturales del río Alberche todos aquellos a los que les encanta viajar para darse baños refrescantes y recuperadores.
Dónde se encuentra Navaluenga
Ya hemos dicho que la localidad se halla en tierras de Ávila, en el área de la Sierra de Gredos. Pero más concretamente podemos decir que se sitúa en la zona más sur de la provincia, dentro del valle del Alberche. Aunque no os engañe esa consideración de “valle”, porque la población está a una altura respetable de unos 760 metros. Eso unido al entorno montañoso, hace que los inviernos sean duros y los veranos frescos, algo que no impide darse un chapuzón en sus famosas piscinas.
En ellas comenzaremos este paseo virtual por los puntos más atractivos de Navaluenga.
Piscinas naturales del Alberche
Una de las estampas más fotogénicas de toda la provincia de Ávila es el puente románico de de Navaluenga. Lo es por el valor histórico y artístico de esta construcción en piedra. Los vecinos lo llaman simplemente Puente Viejo y en realidad, aunque originalmente fue medieval, lo que vemos es algo más moderno, ya que se reconstruyó en el siglo XVI.
La foto del lugar es inevitable desde muchos puntos de vista. Al igual que si hace calor será inevitable acercarse a su parte baja para darse un baño en la piscinas naturales del río. Para algunos la frescura y limpieza de estas aguas, con la belleza montañosa y vegetal de la montaña, es mejor que cualquier playa.
La Necrópolis de Fuenteávila
No hay que pensar que el gran puente sobre el Alberche es el único reclamo patrimonial de Navaluenga. Es verdad que es el más conocido, pero no el único. Ni siquiera el más valioso. Desde un punto de vista científico, quizás lo más interesante sea el yacimiento de la Necrópolis de Fuenteávila, donde aparecieron hasta 15 sepulcros excavados en la roca de duro granito en época alto medieval. Y no solo eso, en el cercano cerro de San Marcos apareció un cementerio visigodo datado en el siglo VII.
Senderismo en Navaluenga
Ya ha quedado claro que a Navaluenga hay que llevarse el bañador. Pero tampoco hay que olvidar las botas de senderista. Son muchas las rutas a realizar. Por ejemplo, uno se puede adentrar por bosques mediterráneos con abundantes alcornoques, encinas y enebros. Al igual que en Navaluenga se halla el mayor bosque de abedules de toda la Comunidad Autónoma.
Hay rutas para todos los gustos. Por ejemplo, para hacer en familia siempre es una opción hacer el corto recorrido que lleva hasta las Chorreras de Muñogrande. Y aquellos que les gusta andar pero con la esperanza de traerse alguna recompensa, pueden seguir el camino al poblado de La Lobera que en ciertas épocas del año es ideal para recoger setas. Eso sí, es necesario pagar la cuota pertinente.
Más formas de disfrutar de la Sierra de Gredos
No acaban aquí las posibilidades de gozar del entorno natural de Navaluenga y esta parte del sur de Ávila. Por ejemplo, además de las botas de senderista os recomendamos llevar unos pequeños prismáticos de ornitólogo. Los usaréis seguro para contemplar un sinfín de rapaces en el cielo. Entre las más espectaculares se encuentran e buitre negro y la majestuosa águila imperial ibérica.
Y del mismo modo que os invitamos a caminar por las sendas y caminos del valle del Alberche, también se pueden hallar itinerarios perfectos para la bici de montaña. Algunos para llegar hasta el cercano embalse de Burguillo, donde se puede completar la experiencia deportiva ejercitando los brazos con los remos de un kayak.
La gastronomía de Ávila
Tanta actividad sin duda cansa y desde luego que hay que recuperar fuerzas a base de alimentos de primera categoría. Por suerte la gastronomía de Ávila tiene un fabuloso repertorio. Y Navaluenga es un buen exponente de ello con productos de todo tipo.
Por ejemplo, los melocotones de Navaluenga tienen sabor y renombre. Incluso se celebra una concurrida fiesta a finales del verano coincidiendo con la floración de los árboles melocotoneros del municipio. Por otro lado, de la riqueza micológica ya hemos hablado antes. Y en cuanto a la exquisita ternera de Ávila, codiciado manjar para los más carnívoros, por supuesto que también está presente en las cartas de los restaurantes locales.
Sentarse en cualquiera de ellos puede ser toda una experiencia culinaria. Aunque también es posible paladear las delicatesen típicas yendo de tapas. A la hora del aperitivo es toda una tradición en Navaluenga. Cada bar compite por tener su mejor tapa, la cual, como es habitual en los establecimientos abulenses, se ofrece gratis con cada consumición.
El vino del Alto Alberche
Esas consumiciones pueden ser las que cada uno desee, pero parece obligado tomar los vinos de la zona. Son vinos de viñedos cultivados en altura, lo cual les da a los caldos una personalidad especial. Para saber más, lo mejor es catar los vinos de la Bodega Garnacha Alto Alberche, situada a las afueras de la población.
Esperamos haber demostrado que Navaluega tiene un poquito de todo, tal y como decíamos al inicio, y que sin duda es uno de los pueblos más atractivos de Ávila. Sin embargo, tal vez haya alguien que todavía tengas dudas, así que le diremos que va a ser un lugar que le encante de día, pero también de noche. Bastará con que mire al cielo y se maraville con el firmamento. Al fin y al cabo Gredos posee unos cielos con categoría starlight, y en Navaluenga se puede descubrir en un nuevo Mirador de las Estrellas que deja a todo el mundo boquiabierto.
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