Es innegable que Valencia es una urbe tremendamente moderna y cosmopolita. Un destino urbano fantástico para una escapada. Pero a veces se nos olvida que también puede ser un buen destino para los amantes de la naturaleza que quieran conocer su entorno.
Para este tipo de viajeros tiene distintos lugares muy atractivos. Algunos extraordinariamente próximos a la ciudad, y otros más lejanos, a una distancia de cómo máximo una hora. Para todos ellos hemos preparado esta lista con varios paseos por la naturaleza cerca de Valencia
Playa de El Saler
Valencia ciudad con su famosa playa de la Malvarrosa, toda la provincia de Valencia con lugares tan concurridos como Cullera o Gandía, e incluso toda la Comunidad Valenciana con sus muchas playas repartidas por las tres provincias, sin duda es un territorio playero por antonomasia en el litoral mediterráneo.
Pues bien, de todas esas playas, seguramente una de las que mejor guarda su aspecto más natural, casi asalvajado, es la playa de El Saler, la cual se encuentra precisamente entre la citada Albufera y las aguas del mar. Un sitio fantástico para ir todo el año, ya que es una de esas playas que siempre invitan a pasear para sentir toda la belleza de la naturaleza marítima.
Paseos por Buñol y el entorno
Ahora os proponemos alejarnos un poquito del mar. A más o menos tres cuartos de hora de Valencia ciudad podemos acercarnos hasta la población de Buñol, muy conocido por su célebre “Tomatina”, pero también mencionable por su patrimonio histórico. Y además aquí nos aguardan varias posibles rutas por la naturaleza y sitios bastante interesantes.
Por ejemplo podemos acercarnos al paraje de Las Moratillas, donde un aula de naturaleza nos desvelará algunos de los secretos de este entorno. Y tras el paseo, podemos descansar en el área de picnic de Fuente Umbría. No obstante, quien desee caminar un poco más, también puede acercarse hasta el vecino Villingordo, cuya denominación de en Siete Aguas, ya nos da idea de que es un paraje donde el líquido elemento le proporciona todo su carácter.
Ruta del agua en Chelva
Seguimos con un paraje natural de la provincia de Valencia donde el agua es la reina. Hay que alejarse más o menos un hora de la ciudad, pero el trayecto merece la pena. Y más aún si nos planteamos hacer esta escapada en familia, ya que es un recorrido fantástico para hacer con los pequeños de la casa.
Ellos se van a sentir auténtico exploradores por el camino que discurre junto al río. Un camino llano y muy cómodo en su gran parte. Eso sí, que no se os olvide una linterna para atravesar su emblemático túnel en la roca. ¡Un divertimento en plena naturaleza!
Parque Natural de la Albufera de Valencia
Si hay un lugar valenciano de enorme peculiaridad, tanto cultural como desde el punto de vista natural, ese es la Albufera ubicada al sur de la capital. Este humedal es magnífico para las aves, de hecho es un área ZEPA, o sea, de Zona de Especial Protección para las Aves. Pero además es un ecosistema magnífico para cultivar el producto gastronómico más carismático de Valencia: su arroz.
Lo cierto es que no hay visita a Valencia que no se pueda considerar completa si comerse una buena paella. Y para ello nada mejor que acercarse a la Albufera. Un territorio natural donde podremos dar relajados paseos, seguir alguna ruta en bici e incluso navegar por este curioso humedal en las barcas tradicionales que siempre han usado pescadores y labriegos de la zona.
Los puentes Colgantes de Chulilla
Relativamente cerca de Chelva está Chulilla, y allí nos espera otra ruta en la naturaleza que nos da un aspecto completamente distinto a la imagen más prototípica que todos tenemos de Valencia. Es la conocida como Ruta de los Puentes Colgantes o de los Calderones.
Un camino para intrépidos que discurre por los Cañones y Hoces del río Turia, que además nos puede acercar hasta el embalse de Loriguilla. Una ruta para caminar, fotografiar y hasta darnos algún chapuzón, si el tiempo acompaña.
La sierra Calderona
Otro punto de Valencia donde uno se puede llevar una auténtica sorpresa por la riqueza natural de este territorio es la Sierra de Calderona, al norte de la provincia. Esta sierra de hecho sorprendió en su momento también a los amantes del ciclismo, ya que comenzó a ser conocida a nivel nacional gracias a las sufridas pendientes que tenía que subir el pelotón de la Vuelta Ciclista a España.
No obstante, no solo dando pedales se disfruta de esta zona. Hay muchas rutas senderistas de interés, algunas muy duras. Pero nosotros hemos elegida una apta para toda la familia. Es la subida hasta el Mirador de El Garbí. El paseo de unos 2 kilómetros merece la pena ya que las vistas sobre este entorno serrano son de lo más fotogénicas, sobre todo si disfrutamos allí de un día claro y una bonita puesta de sol.
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