Las cervezas artesanales han llegado a España para quedarse. Desde hace unos años estamos viviendo una fiebre de producción de cerveza artesanal que ha venido impulsada por una mayor exigencia del consumidor habitual de cerveza que busca propuestas de calidad, innovadoras y de proximidad.
Un informe de 2019 de la consultora DBK cifraba en 522 las cerveceras españolas vinculadas a la producción artesanal, 80 más que en 2016, una tendencia que se ha mantenido al alza estos dos últimos años, con una producción total que suma 240.000 hectolitros, un 33% más que en 2017, con una facturación anual que ha crecido en casi un 30%.
¿Qué son las cervezas artesanales?
Para ser considerada artesanal, una cerveza debe cumplir con una serie de requisitos que, en su mayoría, la diferencia de la producida a nivel industrial. Para empezar, los ingredientes deben ser naturales —ya conocéis los básicos: agua, malta, lúpulos y levadura— y la bebida no debe incluir conservantes siendo desaconsejable su pasteurización porque afecta al sabor.
El proceso de elaboración, inspirado en una receta original del maestro cervecero, debe ser parcialmente manual con la participación de la menor maquinaria posible, realizándose un filtrado manual. Finalmente, la producción no ha de ser muy elevada, no superándose los 5 millones de litros anualmente tal y como señala la Asociación Española de Cerveceros Artesanos Independientes.
Las mejores cervezas artesanales de España
Con más de 500 cerveceras y varios miles de variedades resulta una ardua pero deliciosa tarea elegir las mejores. Aquí está nuestra selección:
Guineu (Barcelona)
Su Dr. Calypso ganó el premio en la categoría Pale Commonwealth en el Barcelona Beer Festival 2020 confirmando a Guineu como una de las mejores cerveceras artesanales de España. Y eso que la variedad IPA es una de las que más competidas siendo una de los tragos de moda en España.
Nacida en 2006 en Valls de Torroella en la comarca de Bages en Barcelona, desde 2008 se lanzan a elaborar cerveza propia usando la maquinaria que venían diseñando desde dos años atrás. Más de una década después, Guineu sigue desarrollando toda la producción en su microcervecería bajo el control de su maestra cervecera.
Arriaca (Guadalajara)
El proyecto Arriaca nace en 2014 apostando por los ingredientes naturales y la producción artesanal en las instalaciones que la firma tiene en Yunquera de Henares. Ya en su propio nombre exponen su respeto por las tradicionales locales: Arriaca es el nombre de un asentamiento celtíbero que precedió a la ciudad de Guadalajara.
Si su poderosa Arriaca Porter se llevó el premio en la categoría de Brown British Beer en el Barcelona Beer Festival, su Arriaca Session IPA se llevó una medalla de oro en los World Beer Awards de 2017, tan solo una pequeña parte de los innumerables premios que suma la cervecera de Guadalajara desde su fundación.
Cierzo (Zaragoza)
Aunque la firma Cierzo nace en 2018, su historia comienza unos años atrás cuando Sergio Ruíz, actual maestro cervecero de la firma zaragozana, comienza a elaborar sus propias recetas caseras que le lleva a fundar Populus en 2011 creando su primera fábrica en Caspe en 2015. Finalmente, Ruíz y su amigo David Laguarda se unen a dos socios más para crear Cierzo con la que aspiran a ser la mejor cervecera artesana de Aragón.
Y de momento no les va nada mal con diversos premios como los cosechados en el Barcelona Beer Challenge 2021 donde triunfaron con la Lunática en la categoría de Strong American Ale y ¡Qué vaina!, medalla de oro en cerveza estilo Session IPA, una variedad en la que colaboraron con los madrileños Península, nuestros siguientes protagonistas.
Península (Madrid)
El venezolano Román Jove es el artífice de una de las cervezas artesanales con más proyección de España, siendo reconocida en su día como la mejor cervecera novel en el Barcelona Beer Festival 2019. La inspiración de Jove está en su padre y la vida familiar en Colorado donde comienza el movimiento artesanal de Estados Unidos.
Para Jove una de las claves del éxito de su Península está en el agua de Madrid que es “idónea para hacer cualquier tipo de cerveza”, como las premiadas Atocha en la categoría de Wood-Aged Imperial Stout o la propia IPA de centeno denominada Unplug.
Basqueland (Guipúzcoa)
Lo de Basqueland es imparable, como una de sus famosas cervezas IPA. Hasta cuatro de sus propuestas fueron premiadas en el pasado Barcelona Beer Challenge: 99 Problems (American IPA), Bushwicked (Doble NEIPA), Chocolate Clouds (Experimental Beer) y Fruit Slide Cooler (Fruit and Spice Beer & Specialty Fruit Beer). Finalmente, se hicieron también con el premio a cervecera del año 2021.
Fundada por el cocinero Kevin Patricio y Ben Rozzi en el año 2015, Basqueland se ha convertido en una de las mejores cerveceras del País Vasco, enclave que se ha erigido en una de las mercas de la cerveza artesanal de todo el país sumando innumerables propuestas.
La Pirata (Barcelona)
Regresamos a Barcelona, epicentro de la producción artesanal española, para disfrutar de La Pirata, una de las fábricas pioneras en este negocio. Entusiastas de la experimentación, comenzaron a trabajar en cerveza artesanal en la cocina de casa hasta que las “primeras catástrofes dieron paso a algo más bebible”.
Y tan bebible como su premiada Blackadder, una cerveza envejecida en barricas de whisky durante 18 meses que da lugar a un trago oscuro y potente, o Hard Decision, medalla de oro en el Barcelona Beer Challenge en la categoría de Dark British Beer.
La Socarrada (Valencia)
Y finalizamos este recorrido por las mejores cervezas artesanales españolas en Valencia para visitar una de esas cerveceras que ha dado un paso más allá internacionalizando su propuesta y elevando la producción hasta el punto de contar con una planta cervecera en Buenos Aires.
Fundada en 2010, lo que la convierte en una pionera del sector, ha sido galardonada durante varios años como uno de los mejores sabores del mundo en el International Taste & Quality Institute de Bruselas, presumiendo además de fabricar la única cerveza del mundo elaborada con agua del mar Mediterráneo.
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