Más de 3.400 kilómetros de líneas de ferrocarril en desuso son la base de uno de los grandes proyectos de turismo accesible de España: las Vías Verdes gestionadas por la Fundación de los Ferrocarriles Españoles que, con la ayuda de Impulsa Igualdad (antes PREDIF – Plataforma Representativa Estatal de Personas con Discapacidad Física), se han convertido en una referencia de turismo accesible en toda Europa con proyectos como Greenways4All o Experimenta Vías Verdes de España.
A continuación, te explicamos cómo las vías verdes se adaptan a todo tipo de turistas gracias al establecimiento de una serie de pautas técnicas además de recomendarte nueve vías verdes accesibles para personas con movilidad reducida.
Las Vías Verdes marcan el camino del turismo accesible
Gracias a su origen ferroviario, las Vías Verdes constituyen los itinerarios más accesibles de acceso a la naturaleza y la práctica del ocio al aire libre para todas las personas, incluidas las personas con discapacidad.
Partiendo de esta premisa, en el año 2013 se presentaba el primer proyecto que vinculaba las Vías Verdes con el turismo accesible. Se trataba de una Guía de Vías Verdes Accesibles para Todas las Personas que llegó para acompañar las guías oficiales generales que se han seguido actualizando desde entonces.
Junto a ella se editaba en colaboración con PREDIF una Guía técnica y de diseño de accesibilidad en Vías Verdes que constituye la base práctica para convertir estos caminos en accesibles para todos, especialmente para aquellas personas que tienen movilidad reducida.
¿Cómo hacer accesible una vía verde?
Lo primero, una definición de vía verde: vías de comunicación autónoma reservadas a los desplazamientos no motorizados (…) que, cumpliendo condiciones suficientes de anchura, pendiente y calidad superficial, garantizan una utilización en convivencia y seguridad a todos los usuarios de cualquier capacidad física. En este sentido, la utilización de los caminos de servicio de canales y de las vías de ferrocarril abandonadas constituye un elemento privilegiado para el desarrollo de vías verdes”.
Como vemos, ya en la definición que aparecía en la Declaración para una “Red Verde Europea” elaborada en 2010 se vinculan las líneas de ferrocarril en desuso con el turismo activo, sostenible y accesible. Pero para que estas vías verdes puedan cumplir con esos criterios deben abordarse una serie de pautas en la planificación, diseño y mantenimiento de estos itinerarios.
Así la Guía de Vías Verdes Accesibles nombra, entre otros, los siguientes requisitos para considerar un camino o sendero como accesible:
- En todo su desarrollo cumplirá una anchura libre de paso no inferior a 2,50 metros.
- Los elementos puntuales tales como señales verticales, mobiliario, etc. se ubicarán fuera del ámbito del itinerario accesible.
- No presentará escalones aislados ni resaltes.
- La pendiente transversal máxima será del 4% y la pendiente longitudinal máxima será del 6%.
- Se garantizará la continuidad de los itinerarios accesibles en los puntos de cruce con el itinerario vehicular, pasos subterráneos y puentes.
- Se colocará un elemento continuo en el lateral del itinerario accesible.
Desde luego, no es sencillo cumplir con estos criterios en más de 3.400 kilómetros de vías verdes que tenemos en la actualidad, pero esta clase de itinerarios se presentan ideales para este reto a diferencia de otros senderos naturales porque ofrecen, por lo general, facilidad de acceso, seguridad gracias a su separación de las vías de tráfico motorizado, así como continuidad de los trazados con soluciones alternativas adecuadas en caso de obstáculos y ausencia de grandes desniveles en los trazados: no olvidemos que estas vías fueron originalmente diseñadas para el tren.
Greenways4all y Experimenta: dos proyectos de turismo accesible en las Vías Verdes
La FFE que gestiona las Vías Verdes se convirtió en 2016 en líder del proyecto europeo Greenways4all con el apoyo de la Unión Europea y su programa COSME. El objetivo de este proyecto fue avanzar hacia la creación de productos turísticos accesibles en base a vías verdes.
Se trataba de aprovechar la oportunidad que otorga la accesibilidad de las vías verdes para ofrecer productos turísticos más específicos, estructurados y organizados tratando de cumplir con “la cadena de valor de la accesibilidad avanzando desde el itinerario accesible al viaje o la experiencia accesible”.
Finalmente se concretaron productos turísticos en tres vías verdes en la península ibérica que aparecieron reflejados en este catálogo editado en 2017.
Por su parte, el proyecto Experimenta Vías Verdes de España formando parte de la Convocatoria “Experiencias Turismo España” del Ministerio de Industria y Turismo se presentó este mes de julio. Este proyecto se apoya también en criterios de competitividad, sostenibilidad y accesibilidad. Entre las diez líneas de acción de este Experimenta Vías Verdes en España conviene destacar:
- Diagnóstico de las principales necesidades de accesibilidad en vías verdes, puesta en valor de itinerarios y oferta de experiencias accesibles para toda la ciudadanía.
- Avance en la intermodalidad, con el desarrollo de dos proyectos piloto de la Experiencia ‘Tren + Vía Verde’ y otros productos de acceso en transporte público.
- Creación de un market place o central de reservas de actividades y servicios del entorno de la ‘Experiencia Vías Verdes’.
- Creación de nuevas Experiencias Vías Verdes, como el ‘Gran Tour por las vías verdes españolas’ o el ‘Pasaporte Digital de Vías Verdes’.
Nueve Vías Verdes accesibles
Es hora de pasar a la acción y descubrir nueve Vías Verdes que facilitan su recorrido a personas con movilidad reducida ofreciendo en algunos casos recursos como bicicletas adaptadas, audio-guías para personas con discapacidad visual o instalaciones turísticas y culturales como museos y estaciones rehabilitadas.
Pero antes de lanzarte a la ruta, independientemente de tus condiciones físicas, se recomienda acudir a la web oficial de las Vías Verdes y/o a las provinciales y autonómicas para estar al día de cualquier incidencia con los caminos ya que son muchos kilómetros a mantener, además de que la meteorología puede generar alteraciones en las mismas.
Así mismo, especialmente en las vías verdes más largas te recomendamos que contactes con los responsables de su mantenimiento para confirmar posibles tramos con peor accesibilidad.
Camino Natural Vía Verde de la Senda del Oso (Asturias)
Empezamos fuerte con una vía verde que es también camino y senda, lo tiene todo: es uno de los itinerarios más famosos de Asturias, también por su facilidad de acceso. Pese a que son casi 30 kilómetros si hace completa, siempre existe la posibilidad de adaptar el recorrido a las condiciones de cada senderista.
Se trata de una senda peatonal, de baja dificultad, con diversas zonas de descanso, buena señalización y paneles informativas. Atraviesa cuatro concejos asturianos (Quirós, Santo Adriano, Proaza y Teverga) que en conjunto forman los denominadas Valles del Oso, por ser hábitat natural de una de las últimas poblaciones de oso pardo cantábrico, una de las tres especies de oso pardo que hay en Europa.
Además, en su entorno te puedes encontrar otras instalaciones culturales como el Museo Etnográfico de Quirós, la Casa del Oso y el Parque de la Prehistoria de Teverga. Se recomienda hacer el sendero con handbike manual cuyo préstamo es gratuito en el Centro BTT Valles del Oso de Tuñón.
Camino Natural Vía Verde del Plazaola (Navarra y Gipuzkoa)
Tampoco es una vía verde más ya que puede presumir de contar con el Túnel de Uitzi, el más largo de todas las vías verdes de Europa con sus más de 2.600 metros. Pero no te preocupes porque tanto este túnel como los otros cincuenta con los que cuenta el trazado están bien iluminados para que no supongan ningún problema para los senderistas.
El Camino Natural Vía Verde del Plazaola comunica Pamplona y Andoain entre Navarra y Euskadi a lo largo de 77 kilómetros. Uno de los tramos, entre Erice de Iza y Aizkorbe, cuenta con desniveles fuertes que hay que tener en cuenta. También señalar que la estación de tren de Lekunberri ofrece un servicio gratuito de bicicletas adaptadas para movilidad reducida.
Vía Verde de los Montes de Hierro (Bizkaia)
No nos vamos todavía de Euskadi porque es hora de conocer el indómito paisaje minero de Enkarterri, un recorrido que nos lleva a conocer más de cerca cómo el hierro que cobija las entrañas de esta tierra modeló durante siglos la historia de la comarca.
Son casi 40 kilómetros entre Artzentales y Muskiz, pasando por Sopuerta, Galdamés, Abanto-Zierbena y Gallarta. Los tramos más recomendables para realizar en silla de ruedas son los que van desde La Aceña-Vallejas hasta Gallarta y el tramo que va desde Kobaron a Cargadero. Por lo demás, se trata de una vía con siete túneles y siete edificios vinculados a las explotaciones mineras.
Camino Natural Vía Verde de la Val de Zafán (Teruel y Tarragona)
Un tramo de esta vía a su paso por la Terra Alta se convirtió en 2010 en una de las primeras referencias en turismo accesible en Cataluña al habilitarlo para todo tipo de senderistas, independientemente de su condición: un tramo de 5 kilómetros que incluye un bordillo de 12 cm. de alto para actuar como guía para personas con discapacidad visual, además de barandillas de seguridad en las secciones que se consideran peligrosas e indicadores podo-táctiles en la superficie del suelo para advertir de la existencia de túneles y cruces.
Camino Natural Vía Verde de Ojos Negros (Teruel, Castellón y Valencia)
Se trata de la vía verde más larga de España, un camino que conecta la comarca del Jiloca, al noroeste de Teruel, con la costa de Valencia pasando por Castellón: son 180 kilómetros que aprovechan una gran parte del del trazado del antiguo ferrocarril minero Ojos Negros-Sagunto que estuvo en funcionamiento hasta la década de los 70.
Debido a su extensión, conviene informarse sobre cualquier incidencia en el trazado que impida su adecuado recorrido. Por ejemplo, todavía está pendiente de habilitar el tramo entre Peracense y Santa Eulalia de 12 kilómetros. El tramo con mejor accesibilidad comienza en Barracas, en Castellón, y transcurre paralelo al del antiguo ferrocarril.
Vía Verde Manacor-Artà (Mallorca)
No solo tenemos vías verdes accesibles en la península, también la única vía verde en las Islas Baleares que en estos momentos forma parte del proyecto es apta para personas con movilidad reducida. Hablamos de los casi 30 kilómetros de itinerario entre Manacor y Artà en el este de la isla de Mallorca.
Se trata de una senda que transcurre por los paisajes dorados de los cultivos del oriente mallorquín poniendo rumbo hacia el mar. En su trazado se incluye el proyecto aún por terminar de Museo del Ferrocarril de las Islas Baleares con la rehabilitación de la estación de Son Carrió.
Camino Natural Vía Verde del Aceite (Jaén y Córdoba)
Es una de las vías verdes más famosas de Andalucía, un camino de casi 130 kilómetros entre Jaén y Puente Genil en Córdoba pasando por localidades como Torredonjimeno, Alcaudete, Baena o Lucena cruzando 12 estaciones, 13 viaductos y siete pasarelas peatonales.
Combinando asfalto y tierra compactada se trata de una senda apta para personas con movilidad reducida en su mayor parte que transcurre por caminos con poca pendiente.
La temperatura es, en este caso, el mayor peligro de esta senda porque lo que, claro está, se recomienda evitar el verano para disfrutar de alguno de los paisajes más agrestes de toda Andalucía, además de su icónico mar de olivos.
Camino Natural Vía Verde de la Sierra (Cádiz y Sevilla)
Pese a algunos tramos con pendiente que puede alcanzar el 9%, los más de 35 kilómetros de la Vía Verde de la Sierra es una de las referencias del senderismo accesible en España habiendo protagonizado el proyecto piloto de Greenways4All y recibiendo el Premio Europeo de Vías Verdes y el premio Andalucía del Turismo en 2016 tras sumar unos 300.000 visitantes al año.
En este sentido, esta vía ofrece también bicicletas eléctricas para personas mayores, baja capacidad física o determinadas discapacidades, además del alquiler de bicicletas adaptadas. Todo ello se puede encontrar en el Centro de Interpretación de la Vía Verde de la Sierra en Olvera, también una referencia en este tipo instalaciones dentro de la red de Vías Verdes españolas. En su web, además, ofrecen información específica para turistas con necesidades especiales.
Vía Verde del Tajuña (Madrid y Guadalajara)
Y terminamos nuestro periplo por estas nueve vías verdes accesibles en la Comunidad de Madrid volviendo a recorrer la Vía Verde del Tajuña, un delicioso camino que nos ofrece un recorrido por la historia, la cultura y la naturaleza del sudeste de esta comunidad, sin olvidarnos del tramo final que nos acerca a Guadalajara.
Se trata de un itinerario de más de 60 kilómetros en siete tramos que conecta Arganda del Rey con Ambite en Madrid a través de localidades como Morata de Tajuña, Perales, Tielmes, Carabaña y Orusco, además de Mondéjar, Yebra y Pozo de Almoguera en Guadalajara.
Aunque cuenta con algunos tramos compartidos con tráfico motorizado y pendiente pronunciada, es una vía que también aparecía seleccionada en la Guía de Vías Verdes Accesibles de 2013 y que ha mejorado en esta última década sus servicios e instalaciones manteniendo su icónico asfalto rojizo en su tramo madrileño.
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